Frío, piel gélida, casi húmeda.
Tacto suave, como si de seda se tratara.
Claro, blanco, palidez...
Cristalina agua, gotas que caen, agotando los segundos,
muriendo poco a poco, sin vida.
Después, ya no se nada más.
Anel
Es hora de partir, de marchar y olvidar.
Recoger los buenos momentos y enterrar los no tan buenos.
Silencio para pensar con el viento de frente y sentir el calor del sol sobre la piel. Sentir que en ese instante no hay nada más, una sola presencia a solas con el mundo.
Ver como el sol se va apagando con el atardecer.
Estar seguro, no tener nada que temer...
Y poco a poco ver la gran gama de colores que ofrece la naturaleza, quedar absorto, mudo al compás del aire.
Sentir la arena bajo los pies... Perderse en ese momento y hacerlo eterno.
Anel