Mostrando entradas con la etiqueta palabras. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta palabras. Mostrar todas las entradas

lunes, 29 de noviembre de 2010

Entre bostezos y risas




Mirar el reloj en busca de las horas perdidas, sin prestar atención a las manecillas. Entre bostezos y risas, el humo va impregnando la habitación. La conversación se va dilatando, pero no importa. Volar sin levantar los pies del suelo. Suspirar soñando despierto. Aquel lugar extraño donde se quedó la vida, ese instante en el que el tiempo se paró porque las manecillas de ese reloj se empeñaron en no dar las horas. Rebeldía fue la palabra, encanto fue el nombre de la situación. Seres perdidos en esos minutos de bostezos y risas, nadando en un humo cada vez más espeso.







Anel

martes, 16 de noviembre de 2010

Después, ya no se nada más.




Frío, piel gélida, casi húmeda.
Tacto suave, como si de seda se tratara.
Claro, blanco, palidez...
Cristalina agua, gotas que caen, agotando los segundos,
muriendo poco a poco, sin vida.
Después, ya no se nada más.






Anel

lunes, 25 de octubre de 2010

Recuerdos que borrar.





Borrando los recuerdos.
Todo un nudo de perspectiva.
Sueños de una mente ilusa, que fantaseaba con hacerlos realidad;
realidades fieras, abrumadoras, que acababan con toda esperanza.
Pensar que estuvo cerca, tan cerca que podía sentir la piel abrasándose.
Vehemencia, fuego, llamas, de las que no quedaron cenizas.
Jugando a creer que era fácil, como cuando se era niño.
Inocencias perdidas, ingenuidades ganadas.
Quemando cada huella de aquella fantasía,
cada pequeño rastro de su existencia.
Todo, salvo las palabras.
Las palabras quedaron para siempre,
para poder recordar que no hay nada más, palabras...
Alimentándose de ellas y a la vez huyendo del dolor que producen,
contradictorio, irracional...
Sin embargo, abrió en libro y las dejó volar...
Se perdieron con el mar, se perdieron en el aire.
Las palabras se fueron, ya no hubo recuerdos que borrar.



Anel

jueves, 7 de octubre de 2010

Donde las olas dejan de romper





Te espero donde las olas dejan de romper, en el lugar en el que se desvanecen, en ese lugar donde las lágrimas se perdieron con el agua y con la ilusión de encontrarte, cayendo inconscientemente una a una directamente desde el corazón que grita como nunca. Latido tras latido anhelando tu presencia. La razón ya no lo puede controlar, quiere dejar paso a los sentimientos...
Las lágrimas se desalaron y pasaron a ser lluvia que más tarde se convirtió en fría nieve de la que sólo quedó hielo. Capas de hielo, como ese maldito corazón que en hielo se ha convertido, pero del que ya no saldrán más lágrimas.
No es un proceso reversible, aun se guarda ese ápice de esperanza, esperanza de que no llegue a ser irreversible.



Foto:Anel

jueves, 1 de octubre de 2009

A pesar de todo...






Enamorada de la vida,
de poder luchar
de seguir día a día,
de caminar y sentirme viva.

Enamorada de la vida,
de la luz de la mañana
de las pequeñas cosas,
de esa melodía atrapada en mi cabeza.

Enamorada de la vida,
de esa dulce ironía
de las vueltas que da,
de la tristeza y alegría.

Enamorada de la vida,
de lo adverso,
de lo malo,
de lo bueno;
enamorada de la vida, a pesar de todo...


Anel

sábado, 11 de julio de 2009

Escribe...




Oigo el sonido de las olas
rompiendo a mi alrededor,
necesitaba esta paz,
necesitaba estar a solas con el mar.
Las olas vuelven a romper
la luna se va escondiendo,
ya llega la luz del alba
con ella las gaviotas.
Pierdo la noción del tiempo
son las seis aquí estoy,
he vuelto.
Me pierdo en el azul intenso
e intento no pensar
y pienso: escribe...


Anel

martes, 23 de junio de 2009

Depués no queda nada




Nada, ni una sola huella,
sólo queda aire
que más tarde arrastra las palabras
nada, después no queda nada.
Nada,ni la risa
sólo queda aire
que paso a ser frío viento
nada, después no queda nada.
Nada,ni una simple mirada
sólo queda aire
que terminó siendo nada
nada, después no queda nada.


Anel

lunes, 22 de junio de 2009

La noche se retrasaba






La noche se retrasaba,
el día llegaba tarde,
mismo modo de pensar
mundos diferentes
mismo modo de actuar
la noche y el día se confundieron
por un instante;
la noche llegaba tarde,
el día se retrasaba...


Anel