martes, 20 de diciembre de 2011

Con los pies congelados no se puede escribir




El otoño se estaba marchitando, dando paso al azul oscuro invierno.

Los árboles terminan de despojar de su tonalidad marrón,
el frío de la mañana comienza a dejar capas heladas.
Las calles se disfrazan de color,
los días cada vez son más cortos,
y la melancolía aumenta por momentos.

Obviamente, con los pies congelados no se puede escribir.



Anel

jueves, 15 de diciembre de 2011

Anoche soñé contigo




Respiración agitada, despertar.

Intentar recoger cada pedazo de esa pesadilla,
recordar lo que hace que el cuerpo se agote,
caer por un precipicio de rocas grises; sin dolor, no había dolor.
Vacío; divagar, deambular, volar... infinito, todo azul,
deformada una imagen.
Más tarde, se desvanece, no queda nada de su presencia.
Las lágrimas comenzaron a rodar,
los ojos, extraños, no lo entendían; pararon, siguió el vacío.

Respiración agitada.


Anoche soñé contigo, pero ya no eras tú.




Gracias a mi modelo, tú sabes por qué ;)

Anel